Alimentación animal a base de maíz
El maíz es una especie multifuncional. El cultivo puede ensilarse, o bien puede cosecharse para la obtención de grano. Todo el maíz cosechado para forraje y gran parte del que se cosecha para la obtención de grano (el 80 %) está destinado a la alimentación animal.
Maíz para forraje
El maíz para forraje es fundamental para la alimentación de los rebaños de bovinos de producción lechera durante todo el año. Es una fuente de energía imprescindible, aunque deba completarse con la aportación de fibra y proteínas para cubrir las necesidades de los animales. La buena calidad del forraje condiciona su apetencia y consumo por parte de los animales.
Puede cultivarse en todas las regiones de Europa. Todas las plantas se cosechan enteras, con un 32-33 % de materia seca, con una ensiladora. A continuación, los tallos, las hojas, las mazorcas y los granos se trituran, apisonan y cubren con un toldo hermético a fin de garantizar una buena conservación del forraje y para evitar el desarrollo de microorganismos susceptibles de degradar la materia orgánica y de provocar problemas sanitarios a los animales.
Maíz de grano húmedo
Los animales también pueden consumir el grano de maíz húmedo, en particular los animales de ceba (becerros, cerdos y aves de corral).
Ese grano húmedo es especialmente rico en almidón, lo que facilita una digestión más lenta que otros tipos de cereales. Debe cosecharse antes que el maíz para grano seco. Es necesario prever un contenido de agua de entre el 26 y el 32 %.
Poder recurrir al maíz de grano húmedo para alimentar al rebaño permite al agricultor ahorrar costes de secado.
Maíz de grano seco
Otro uso alimentario es el del maíz de grano seco, cosechado en grano o en panochas. Cerca de tres cuartos de la producción de maíz para grano son consumidos directamente por animales, principalmente aves de corral y cerdos. Tiene que secarse tras la cosecha. A continuación, se distribuye directamente a los animales.
Es apreciado por su aporte energético, su riqueza en almidón y el aceite de su semilla. Este maíz de grano seco también es apreciado por los fabricantes de alimentos para ganado. Se tritura y mezcla con otras materias primas y, a continuación, se distribuye como harina o granulados.
